Manifiesto

Manifiesto de Balompié:
  • Escribimos futbol sin tilde porque somos mexicanos y el acento lo ponemos donde nos da la gana, envuelto en cinta de aislar.
  • Estamos orgullosos de inventarnos un trabajo para hablar de lo que más nos gusta y nosotros ponemos las reglas. La palabra censura nos la saltamos como si fuera un tope.
  • Si hay necesidad, imaginamos cosas chingonas para calificar caminando. Pueden hablarnos de cualquier cosa, menos de futbol, así que nos reservamos el derecho a dar explicaciones.
  • Nos aburrimos de las publicaciones clicbaiteras y de los personajes gritones. Queremos llegar a quienes extrañan el texto de largo aliento; ya hay suficiente contenido efímero, mejor soñamos con relatos que envejezcan bien después del retiro.
  • Coleccionamos desde que éramos niños y nos pusimos tristes de ya no tener en qué gastarnos los domingos. Ahora chachareamos publicaciones del siglo pasado y alguien tiene que pensar en los cazadores de tesoros de las décadas venideras.
  • La historia del Balompié mexicano es un partido con mucho tiempo de compensación. No aspiramos a armar todo el rompecabezas, pero sí a hacerlo con pasión.
  • Jugamos por y para los lectores. Aunque los anunciantes son bienvenidos, deben respetar el Fair Play. Aquí no hay Pacto de Caballeros.
  • Nos quitamos la camiseta de nuestro club para escribir sin tinta de colores; no hablamos bien del que no lo merece y no matamos al que no se lo ha ganado
  • Preferimos una buena plática de bar que perder tiempo en el VAR, por eso apagamos las pantallas y salimos a la calle a hablar con los protagonistas.
  • Firmamos con nombre y apellido. Ya basta de redacciones genéricas y créditos vacíos, más tristes que jugar en un estadio sin gente.
  • Respetamos el pasado porque construyó nuestro presente y nos trajo hasta aquí. Soñamos con un futuro mejor… porque no queda de otra.